¿Te atreves con la impresión de altura?
Hacía tiempo que queríamos hablarte de una de las tendencias en auge en interiorismo: la decoración de techos. Las formas son múltiples y los materiales ilimitados y sí, ya sabemos que no estamos descubriendo nada nuevo y que esta historia se remonta al hombre de las cavernas pero no por ello podemos obviar que en los últimos años empapelar nuestros techos es tendencia o vuelve a ser tendencia, como prefieras, aunque no des por hecho que ya está todo inventado. Partimos de una base con las nuevas técnicas en impresión digital empapelar es una opción personalizable, económica, rápida, exige poca preparación (salvo lijar el techo en algunos casos) y la mayoría de los papeles vienen preencolados. Si eres un alma decorativamente inquieta este es tu post.
¡Comenzamos!
Si definitivamente hay un lugar en la casa en el que podamos disfrutar de un techo decorado ese es el dormitorio, principalmente porque vamos a visualizarlo desde la mejor posición, tumbados.
Y ya si se trata de la habitación de los reyes de la casa las opciones se multiplican: nubes, cielos, estrellas, lunares… Los vinilos son una de las opciones más baratas y bonitas. Anímate.
Por supuesto, es importantísimo elegir el estampado adecuado y dosificar para no ser repetitivos. Por ejemplo, las rayas y geométricos amplían visualmente y son perfectos para habitaciones pequeñas.
En este blog somos muy fans de recrear ambientes clásicos y frescos antiguos a través del papel o lo que es lo mismo, de la democratización del arte.
Utiliza papel para enmarcar distintos ambientes dentro de una estancia. El efecto es mayor si la habitación está decorada en tonos blancos o neutros.
Sin duda una de las opciones más impactantes es utilizar el mismo papel en la pared y en el techo. Que el techo parezca una continuidad de la pared o por el contrario una caja de cerillas dependerá de la altura y del estampado que elijas entre otros factores.
O simplemente puedes combinar el papel del techo con el de la pared, rayas y flores, estampados geométricos, texturizados, entelados, molduras… Si no tienes alma de decorador y el presupuesto no te da, combina un papel estampado con otro de motivos sencillos y colores lisos y acertarás seguro.
En espacios pequeños como baños y vestidores los resultados son sorprendentes. Cuidado de no agobiar.
Si lo tuyo no son las estridencias ni te gusta pecar de osado, hay papeles texturizados muy originales que le darán el punto atrevido que buscas. Elígelos en tonos claros y neutros y acertarás seguro.
Otra opción mucho más económica y resultona es usar papeles que imiten acabados como madera, estuco o mármol. Evitarás obras, ahorrarás costes, pero ojo, busca acabados conseguidos de lo contrario en vez de original puede resultado será un poco vulgar. (Sabemos que el papel del ejemplo no está en el techo pero no nos hemos podido resistir a su acabado de diez, es maravilloso)
Y si unes tres requisitos fundamentales como: techos altos, algo más de presupuesto y adaptar la decoración por temporadas, la mejor opción es instalar un sistema con perfiles de aluminio como Descor de Meevo. Además de que el resultado es precioso combinado con la iluminación, el efecto es una gran caja de luz que te permite cambiar la decoración con regularidad, de manera sencilla y sin obras, así como la opción de utilizar tejido absorbente del ruido, por lo que es perfecto para tiendas, oficinas, gimnasios, publicidad…
También en grandes espacios arquitectónicos donde es difícil empapelar techos desiguales y antiguos o para tapar grandes superficies sin recurrir al pladur. Aquí las ventajas se multiplican. Si sientes curiosidad sobre su montaje puedes verlo aquí.
Como ves hay opciones para todos los bolsillos, gustos y “circunstancias” decorativas. ¿Aún piensas que es difícil?